lunes, 14 de marzo de 2011

92 / AMERICAN GOTHIC






----------Grant Wood fue un pintor regionalista que nació y vivió en Iowa (EE.UU.). Este fue el primer cuadro suyo que adquirió un Museo –hoy se encuentra en The Art Institute of Chicago- y la primera oportunidad que tuvo el hombre de salir más allá de las fronteras de su estado.
----------Gótico Americano es la reivindicación de un tipo de vida que fue y que no volverá. El cuadro, a partir de su adquisición por el Museo, comenzó a ser reproducido y a colarse en todas las casas, en un fenómeno similar al que ocurrió en los hogares españoles de posguerra con la Última Cena de Juan de Juanes o las Inmaculadas de Murillo o, a otro nivel, con los cuadros de caza de Explosivos Riotinto.
----------Ante la típica fachada de madera de la vivienda de una granja de principio del siglo XX, posan –sólo posan- un matrimonio de granjeros con los atuendos representativos: pantalón vaquero con peto, camisa sin cuello y chaqueta el hombre y delantal y camafeo la mujer. El apelativo gótico se refiere al tipo de ventana de madera situada entre ambos, de arco apuntado, aunque también, de manera amplia, se puede englobar el aspecto de las dos personas, de porte estirado, delgado y serio. El hombre –un autorretrato del autor- lleva en la mano una horqueta para manejar la paja del granero y la mujer parece que en cualquier momento se va a poner a hacer el tradicional pastel de manzana de las películas de la América profunda.
----------¿¿Por qué nos atrae este cuadro y por qué tuvo tanto éxito en su momento? No es sólo por las rayas verdosas de la camisa raída aunque limpia del hombre; ni por la calidad desgastada del peto de tela vaquera muy usada; no se trata solamente del realismo de la puntilla en diente de sierra que luce la mujer en los bordes de su delantal, ni de la monótona repetición de puntos y círculos del tejido del mismo. La clave creo que está en las caras de los personajes, en esa dulce tristeza que reflejan ambos con sus rostros cansados: la nostalgia de lo que fue en un tiempo, duró lo que tuvo que durar y ya no volverá jamás; de lo que se ha ido para siempre.
----------Esta obra, de tamaño mediano pequeño –unos 80x60 cm.- es la fijación eterna de un estilo de vida que sirvió a muchos, pero que ahora está congelado como en una foto. El motivo ha quedado aparcado fuera del tiempo y ya no es posible medirlo en días, meses o años, sino en unidades de recuerdo o de nostalgia. Tras una vida de trabajo y estrecheces –la escena está fechada hacia 1930, tiempos de depresión económica- el trabajo actual de los dos personajes es posar, sólo posar, las veinticuatro horas del día.
----------Y, a cambio, su sueldo es la inmortalidad...

2 comentarios:

  1. Gracias por este análisis tan comprensible para mi, una principiante.
    Te invito a que visites mi modesto blog,
    http://billieyelarte.blogspot.com/
    Un saludo

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  2. la figura del hombre no es un autorretrato, es su dentista, ya que ningun granjero de la zona se presto a posar. ( la figura femenina es su hermana).

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